La Celestina was originally written by Fernando de Rojas (1465-1541) as a work of prose written in acts comprised almost solely of dialogue. As a literary artist, Rojas existed on the verge between the Middle Ages and the Renaissance. The medieval influence is evident in various themes present in La Celestina such as morality, punishment and pessimism while the themes of sensuality and pleasure belong to the Renaissance era. Rojas also expresses a humanist perspective in his writing, which was a point of view encouraged by Ferdinand and Isabella during their reign.

Humanism is the trend that occurred in literature and social and intellectual philosophy from 1400-1650 and marked the transition from the Middle Ages to the Renaissance. Anyone who lived in this era was essentially trapped between supernaturalism and the potential beginnings of a modern scientific world. The beliefs of this era were characterized by doubt in place of blind faith in God and religion. Suddenly, the human experience in the present became more fascinating than the hazy promise of an afterlife. There was more awareness of man’s mortality; life was viewed as finite instead of a stepping stone for another world to come after the death of the physical body. The goal for a humanist was to live a happy and efficient life on earth and to make the best out of the given time, instead of working towards the promise of salvation. Christianity in the Medieval Ages forced strict limitations on individual freedom and expression and demanded that its followers be unquestionably obedient to the church and God. However, the humanism era created a period of freedom where individuality and curiosity was celebrated and encouraged. In La Celestina, the humanist perspective is present in the depiction of human weakness, especially in the exploits relating to love and relationships.

Little biographical information can be found on Rojas, but it is commonly known that he was born in La Puebla de Montalbán, Castile. In 1490, he earned a bachelor’s degree in law from the University of Salamanca and moved to Talavera de la Reina in 1507. He practiced law in Talavera for about 40 years before assuming the position of Lord Mayor. While Rojas comes from Jewish ancestry, his more recent ancestors were conversos, or Christians who had converted from Judaism. La Celestina was the only literary work produced by Rojas, and it was one of the first to portray romance in everyday life, albeit in an explicit manner. Because of the obscene nature of some of the scenes, La Celestina remains one of the most repressed Spanish classics whose circulation abroad was heavily restricted. One of La Celestina’s unique characteristics is the combination of tragic and comic elements, which is a method that had never been successfully done before and has not been easily replicated in the future.

La Celestina fue escrita originalmente por Fernando de Rojas (1465 – 1541) como una obra de prosa compuesta por varios actos casi exclusivamente en dialogo. Como artista literario, Rojas existió en el límite entre la Edad Media y el Renacimiento.  La influencia medieval es evidente en varios temas presentados en La Celestina tal y como la moralidad, el castigo y el pesimismo, mientras los temas de sensualidad y placer pertenecían a la era Renacentista. Rojas expreso también una perspectiva humanista en su forma de escribir, un punto de vista alentado por los Reyes Católicos: Ferdinand e Isabel durante su reinado.

El humanismo es la tendencia que se produjo en la literatura y la filosofía intelectual y social de 1400-1650 donde marco la transición de la Edad Media al Renacimiento. Cualquier persona que viviera en esta época estaba esencialmente atrapada entre lo sobrenatural y los comienzos potenciales de un mundo científico moderno. Las creencias de esta época se caracterizaron por la duda a la fe ciega de Dios y la religión.  De pronto, la experiencia humana en el presente se volvió más fascinante que las promesas vagas de un más allá y la vida después de la muerte. Había más conciencia de la mortalidad del hombre; la vida fue vista como finita, en lugar del paso a otro mundo después de la muerte del cuerpo. El objetivo de un humanista era vivir feliz y eficazmente en la tierra, sacándole provecho al tiempo dado en vez de trabajar por una promesa de salvación. El Cristianismo en la Edad Media forzó estrictas limitaciones a la libertad individual y de expresión pidiéndole a sus seguidores ser obedientes a la iglesia y a Dios sin objeciones y preguntas. Sin embargo, la era humanista creo un periodo de libertad donde la individualidad y curiosidad eran celebrados y fomentados. En La Celestina, la perspectiva humanista es presentada en la debilidad humana, especialmente en las hazañas relacionadas con el amor y las relaciones.

Muy poca información bibliográfica se puede encontrar de Rojas, pero se sabe que nació en La Puebla de Montalbán, Castilla. En 1490 obtuvo una licenciatura en Derecho de la Universidad de Salamanca y se mudó a Talavera de la Reina en 1507. Practicó leyes en Talavera por 40 años antes de asumir el cargo de Alcalde. Rojas era de ascendencia judía, sus antecesores más cercanos eran conversos, o cristianos que se habían convertido del judaísmo. La Celestina fue la única obra literaria producida por Rojas, y fue una de las primeras en retratar el romance de la vida diaria, aunque de una manera explícita. Debido a la naturaleza obscena de algunas de las escenas, La Celestina sigue siendo uno de los clásicos españoles más reprimidos en el extranjero  cuya circulación fue fuertemente restringida. Una de las características únicas de La Celestina, es la combinación de elementos trágicos y cómicos, método que nunca se había logrado antes con éxito y no ha sido replicado fácilmente.